Nuestro objetivo en portaldios.com es brindar un emplazamiento donde las personas puedan vigorizar su relación con Todopoderoso y profundizar en su comprensión de la Nuevo testamento. Creemos que la Palabra de Dios es una fuente constante de sabiduría y Orientador, y queremos ayudar a las personas a obtener a ese conocimiento y aplicarlo a sus vidas diarias.
Inclusive así, se debe dialogar del hecho que algunos han tratado de enseñar lo que se llama “la doctrina de la subsecuencia” o “segundo trabajo de la Chispa”, que dicen que Cristianos reciben una parte del Espíritu Santo al momento de la salvación y luego lo que llaman el “bautismo del Espíritu Santo” más tarde. Examinar las escrituras con precaución nos indica que esta posición está equivocada.
Y Jehová es el que nos confirma con ustedes en Cristo y el que nos ungió; es aún quien nos ha sellado y ha puesto como aval al Espíritu en nuestros corazones.
El segundo eje de su argumentación se pedestal en los usos litúrgicos tradicionales. Al hilo de la fórmula bautismal de Mateo: «Id y bautizad a todas las naciones en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo», argumenta que si en esa fórmula el Padre no desdeña la comunión con el Hijo y el Espíritu, separarlos en naturalezas distintas es ir contra la voluntad del Padre,[72] hecho del que luego afirma que es la verdadera «blasfemia contra el Espíritu Santo».
En el sionismo y el cristianismo se cree que el Espíritu Santo puede acercarse al alma y transmitirle ciertas disposiciones que la perfeccionan. Estos hábitos se conocen como los «dones del Espíritu Santo».
Este entendimiento de la Trinidad permite a los creyentes examinar cómo cada persona contribuye a su relación con Todopoderoso y su vida espiritual.
El Espíritu de Alá ha sido una presencia constante a lo dilatado de la historia bíblica. A continuación, se presentan algunos ejemplos de su manifestación en el Antiguo y Nuevo Testamento:
Por otro flanco, en el libro de Job este afirma que «El espíritu de Altísimo me hizo, y el soplo del Omnipotente me dio vida» Job 33:4. Por ello el Credo niceno dice del Espíritu Santo que es «señor y dador Source de vida».
Algunas personas se burlaron de los discípulos porque no podían entender el engendro de las lenguas y lo atribuyeron a la enajenación.
Las Señal de nuestra herencia se refiere a que tomar el Espíritu es solo un plazo primero y que luego recibiremos la otra parte si perseveramos hasta el final. Asimismo se puede proponer que son las primicias del Espíritu. Veamos algunos versículos:
Este bautismo no es simplemente un ritual simbólico, sino una inmersión en la presencia y el poder de Altísimo que capacita al creyente para estar una vida victoriosa y ser un testimonio efectivo de Cristo.
Hay quienes pueden fingir o malinterpretar estas manifestaciones. Por lo tanto, es crucial buscar la Práctico y la sensatez de líderes cristianos maduros y estudiar las Escrituras para comprender correctamente este acontecimiento.
Otros relatos de la Gran Comisión anotan la promesa del Señor de estar con Sus discípulos hasta el fin de la antigüedad (Mateo 28:20) Vencedorí como Su promesa de acertar a todos los creyentes el poder de echar fuera los demonios, platicar en nuevas lenguas, ser victoriosos sobre las serpientes, ser protegidos contra el veneno, y orar con éxito por la sanidad de los enfermos (Marcos 16:17-18). Todas estas promesas se cumplen por medio del poder del Espíritu Santo que mora en ellos.
Por otro lado, los grupos pentecostales y carismáticos creen que el bautismo en el Espíritu Santo puede darse en la conversión o en algún momento posterior, que se caracteriza por el don de lenguas.